Ya sea que hagas pesas o lleves un entrenamiento de intervalos de alta intensidad, lo mejor que se puede hacer para ayudar al cuerpo a recuperarse del entrenamiento intenso es consumir proteína.

Este tipo de proteínas obtenidas a partir del suero de leche son la mejor opción para la recuperación gracias a su alto contenido de aminoácidos. Desafortunadamente para las personas con intolerancia a la lactosa estas puedan causar malestares estomacales. Aquí es donde la proteína hidrolizada entra en acción; esta proteína es de acción rápida ya que libera más rápidamente los aminoácidos y produce una recuperación más rápida del daño muscular. De igual manera recupera antes la capacidad de restablecer fuerza después de un entrenamiento muy intenso.

¿Qué es la proteína hidrolizada?

La proteína hidrolizada es uno de los tantos suplementos proteicos, este tipo de proteína ha sido “digerida” o hidrolizada previamente en péptidos y/o aminoácidos para facilitar su asimilación por el organismo. Durante este proceso se agregan enzimas proteolíticas, las cuales se encargan de descomponer las proteínas, imitando el proceso de digestión obteniendo de esta manera proteínas intactas descompuestas en aminoácidos individuales y pequeñas cadenas de péptidos de aminoácidos.

Por esa razón es la proteína más recomendaba para tomar inmediatamente después de una rutina intensa de ejercicio. El cuerpo la absorberá rápidamente haciendo que se sienta con más energía y el sistema digestivo entregará los aminoácidos más rápido hacia los músculos.

Las proteínas hidrolizadas tienen amplios usos en nutrición, medicina y en la industria alimentaria, la mayoría de los suplementos de proteína hidrolizada del mercado están destinados a deportistas que desean aumentar su masa muscular y a personas que buscan mantener la firmeza y tersura de su piel.

Beneficios de las proteínas hidrolizadas

 Excelente perfil de aminoácidos

Las proteínas hidrolizadas contienen mayor cantidad de leucina en comparación con las proteínas aisladas. La leucina es esencial para el desarrollo muscular, lo que le proporciona una ventaja sobre otras formas de proteína, aunque la diferencia es mayor en cuanto a la caseína.

La caseína intacta proporciona un aumento lento y constante de los niveles de aminoácidos. No produce un aumento pronunciado en los niveles, razón por la cual se considera que es "anticatabólico" en lugar de anabólico.

Por el contrario, la caseína hidrolizada produce un incremento en los niveles de aminoácidos similares a la proteína de suero, pero manteniendo niveles elevados de aminoácidos durante las horas posteriores como la caseína tradicional.

Es baja en carbohidratos y grasas.

Gracias al proceso de hidrólisis se obtiene una proteína más concentrada, lo que significa que es baja en carbohidratos y grasas. Por lo tanto, las proteínas hidrolizadas pueden ser una excelente opción para quienes llevan una dieta baja en grasas y carbohidratos.

Ayuda a una recuperación más rápida

En vista de que la proteína hidrolizada en polvo contiene péptidos más pequeños en comparación de la no hidrolizada, se absorbe de manera más rápida en el tracto gastrointestinal, quedando disponible para su uso por el cuerpo, haciendo que el suministro de nutrientes sea más rápido hacia los músculos. Esto ayuda al tiempo de recuperación y también disminuye el dolor muscular.

Es amigable con el estómago

Las proteínas en polvo hidrolizadas contienen menor cantidad de lactosa gracias al proceso de hidrolisis. Gracias a ese proceso se obtiene como resultado un suero de proteína muy bajo en lactosa, grasas y carbohidratos. Por lo tanto, no genera los problemas digestivos como hinchazón, diarrea o calambres a diferencia de las proteínas tradicionales.